ORDEN DE LAS DIACONISAS

 

Era una congregación de monjas o diaconisas regulares de nuestra Señora, bajo la Regla de san Agustín que fue instituida por el benemérito Pedro Foreiro y aprobada por el Papa Pablo V.

Desde el siglo I, hubo ciertas mujeres dedicadas al servicio de la Iglesia con el nombre de Diaconisas, pero no tenían Orden Sagrado alguno. Eran mujeres viudas de santa vida y costumbres irreprehensibles. Pasaban de 60 Hermanas. Su ministerio u oficio, según Baronio, era guardar la puerta de la iglesia por donde entraban las mujeres, darles asiento, y separarlas de los hombres. Visitaban a las mujeres presas en las cárceles, las animaban y servían.

Desnudaban a las mujeres adultas cuando se bautizaban y en la confirmación les limpiaban el santo öleo. También amortajaban y comonían sus cuerpos para enterrarlas. Subsistieron hasta el siglo VI.