ORDEN
DE LOS ACÉFALOS
Sin
cabeza, nombre que dieron a unos herejes, porque entre ellos ninguno se preció
de ser cabeza. Eran los que impugnaban el concilio de Calcedonia. Los que
figuraron principalmente fueron Severo, Atanasio y otros eutiquianos que en
Alejandría se separaron del obispo Pedro Mongo, por parecerles poco contrario
del concilio. Doscientos furiosos, capitaneados por Severo, después de haber
alborotado varios pueblos del Oriente, se reunieron en Constantinopla para
atacar al Patriarca defensor del concilio, en cuya ciudad cometieron mil
excesos. 
Se
llamaban también acéfalos aquellos clérigos que no vivían sujetos a
determinado obispo.