Esta orden
fue creada en Polonia el día 7 de mayo del año del Señor de 1665, por Estanislao
Agustín Poniatowski, en honor del santo patrón de aquel reino, y con el deseo de
atraer a su favor a los grandes de Polonia. Fue abolida cuando se efectuó la
partición de estado, y restablecida en el ducado de Varsovia después de la paz
de Tilsit.
Augusto de Sajonia la sostuvo en tanto que fue duque de Varsovia; pero cuando se unió el reino de Polonia al imperio de Rusia, el emperador Alejandro I, que vino a ser jefe soberano y gran maestre de la orden, la restableció solemnemente el año 1815, dándole nuevos estatutos y dividiendo sus miembros en grandes cruces, comendadores, oficiales y caballeros.
Después de la última revolución polaca, la orden de San Estanislao tomó el titulo de imperial y real, y fue incorporada a las demás órdenes de Rusia. En virtud e un decreto de 1839 se la destinó a servir de premio a las personas que por sus servicios o por sus acciones hubieran contribuido a la prosperidad del imperio.
Esta orden está colocada en categoría después de la de Santa Ana.