ORDEN DEL AMOR DEL PRÓJIMO

 

 

Esta orden fue establecida en Suecia, en el año del Señor de 1708, por la emperatriz Elisabeth Cristina. Se confería a las personas de ambos sexos para recompensar la fidelidad y adhesión a la soberana.

 

Esta orden fue olvidada muy pronto, y en el día de la fecha aparece en la historia como si no hubiera tenido ninguna importancia.

 

La divisa de esta orden era una cruz de oro de ocho puntas, esmaltada de blanco, con cinta encarnada, y con el siguiente lema: «Amor proximi».