Jaime
de Molay (1292-1314)
De este Maestre, que fue el último de la extinta Orden del
Templo, solo diremos en este capítulo que nació en la antigua región de Borgoña
(Francia), en el año 1240.
Recién cumplidos los veinticinco años, ingresó en la Orden del Templo
de Jerusalén, donde fue muy bien recibido porque en aquellos tiempos
—llegados los días en que los caballeros seglares habían perdido ya gran
parte de la vocación que antaño sintieran por entrar en la Orden, por haberse
alejado de ella gran parte de la gloriosa leyenda que con tanta humildad y valor
se habían ganado en Jerusalén—, no eran muchos los que elegían la menciona
Orden para profesar y aceptar los votos de pobreza, humildad y castidad.
Sin
embargo, como esta Orden era la más rica y prospera de todas las que existían
en aquel tiempo, sí que ingresaban muchos caballeros que elegían hacerlo en la
«Orden
Tercera»,
que como ya sabemos por haberlo leído antes, eran caballeros que entraban
casados y, por lo tanto, no tenían por qué dormir ni vivir dentro de la
Encomienda; también eran recibidos muchos soldados que deseaban ingresar por el
buen sueldo que percibían.
Del resto de la historia de este Maestre, nos iremos enterando conforme
vayamos avanzando en la lectura de las páginas que vienen.