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                     JAVIER. Quisiera saber más sobre el esculto Francisco Salzillo y su obra. Estuve la Semana Santa pasada en Murcia y quedé impresionado por las esculturas de este Escultor. GRACIAS.  | 
                  
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               Francisco
              Salzillo nació en el año 1707 en el número 1 de la desaparecida
              calle de las Palmas, cercana a un Convento que se llamaba de Santa
              Isabel, que hoy ya no existe, (este Convento estaba cerca del
              Mercado de Abastos, en lo que hoy conocemos como "Plano de
              San Francisco"). Fue bautizado por el beneficiado José Córcoles
              y Villar. (Beneficiado
              era un clérigo de rango inferior que gozaba de un beneficio
              eclesiástico sin ser cura. Es decir, un presbítero, un cura que
              todavía no había terminado la carrera, que tenía beneficio o
              permiso para administrar algunos sacramentos. Su padrino fue don 
              Francisco José de Herrera, y lo bautizaron con el nombre
              de: Francisco Antonio José).
              Gregorio y con los apellidos: Salzillo, por parte de su padre que era italiano y Alcaráz,
              por parte de su madre que era murciana. El
              matrimonio formado por sus padres, don Nicolás Salzillo y Gallo y
              doña Isabel Alcaraz Gómez, tuvo siete hijos, tres hijos y cuatro
              hijas. Y los tuvieron por este orden: Francisco, que es el que hoy
              estamos recordando, Teresa, Francisca de Paula, Magdalena, José
              Antonio, Patricio e Inés  Cuando
              tenía edad para asistir a la escuela, ingresó en el colegio de
              San Esteban, dirigido en aquellos tiempos por religiosos jesuitas.
              Allí estudió Arte, Filosofía y Matemáticas. La estancia en
              aquel colegio les costaba a sus padres 42 reales y una fanega de
              trigo al mes, cosa que se podían permitir porque el padre era un
              escultor al que no le faltaba el trabajo y la madre había
              heredado unas tahúllas de tierra que tenían arrendadas. Cuando
              completó el ciclo de su educación en el colegio de San Esteban,
              Salzillo comenzó a estudiar dibujo y colorido con el clérigo don
              Manuel Sánchez. Terminado
              este ciclo, y motivado quizás por la influencia de los religiosos
              que lo habían educado, ingresó como novicio en el Convento de
              los Dominicos, y a buen seguro hubiera profesado de no ser por la
              muerte del padre que dejó a su familia desamparada. Fue
              entonces cuando se hizo cargo del taller de su padre. El primer
              trabajo que hizo Francisco Salzillo en el taller de su progenitor,
              fue acabar la imagen de Santa Inés de Monte Pulciano, que el
              padre había dejado sin terminar. El
              año 1746 se casa con doña Juana Vallejos Martínez. No bendijo
              el Señor el hogar de Salzillo con frutos matrimoniales. Pero en
              enero de 1753, siete años después de haber contraído
              matrimonio, vino al mundo su hija María Fulgencia. Hasta hace
              poco, los biógrafos de Salzillo, excepto Martínez Tornel, que
              dice que tuvo Salzillo
              varios hijos, coincidían en decir que el escultor no tuvo más
              hijos. Ni Martínez Tornel, ni los demás biógrafos tenían razón.
              Yo, escarbando por los archivos de algunas iglesias, he tenido
              acceso a un documento que nos da fe de que Salzillo tuvo, antes de
              nacer su hija, un niño de cuya existencia nada se sabía y que
              vivió algo más de ocho meses. El documento dice literalmente: <<Niño
              en nuestro Padre Jesús. 
              Murió en esta Parroquia del Glorioso Arcángel San Miguel de la
              ciudad de Murcia, y fue sepultado en la Real Capilla de Nuestro
              Padre Jesús oi diez de julio de 1751 un niño hijo de don
              Francisco Salzillo y doña Juana Vallejos feligreses de dicha
              Parroquia y para que conste lo firmo Dn. Antonio Durán.>> En
              el año 1763 falleció su mujer. Esta pérdida le afligió
              extraordinariamente dado su carácter de esposo fiel y bien
              avenido.  El
              2 de Marzo de 1783, contando el artista con 75 años de edad y
              pronto a cumplir los 76, entregó su alma a Dios cristianamente. Fue
              enterrado, por deseo expreso, en el Convento de las Capuchinas,
              donde su hermana Francisca de Paula era monja. Y pidió que lo
              amortajaran con el hábito franciscano. Salzillo
              estuvo descansando en aquel Monasterio hasta que en el año 1936,
              en plena guerra española, fue destruido el Convento. Su  
              lápida no
              fue saqueada, quedó intacta. En  
              ella todavía se leía el
              epitafio que él en vida quiso que le esculpieran: ABSORPTA 
              EST MORS IN VICTORIA, que traducido del latín quiere
              decir: LA MUERTE HA SIDO
              VENCIDA POR LA VICTORIA. Después
              de la guerra, las monjas capuchinas construyeron otro convento muy
              cerca del Malecón, y se llevaron los  
              únicos restos  
              que quedaban del escultor: 
              Su Lápida. LA OBRALa
              obra de Salzillo está repartida mayoritariamente, por cuatro
              provincias del sudeste de España: Murcia, Alicante, Albacete y
              Almería, por este orden cuantitativo, guardan el tesoro
              inapreciable de sus tallas. Sobre todo en Murcia, la ciudad donde
              nació y trabajó hasta descansar en su suelo.  Muchas
              de sus obras han desaparecido, unas condenadas a las llamas, otras
              entre las manos inhábiles de inadecuados restauradores y, otras,
              como en el caso de Santa Inés de Monte Pulciano, nadie sabe dónde
              están. Está imagen era propiedad de los Dominicos. Ellos
              encargaron y pagaron su talla. Cuando los dominicos tuvieron que
              dejar el convento, por orden del obispado de Murcia, en favor de
              los jesuitas, quienes todavía lo tienen, la imagen se perdió. Y
              lo extraño del caso es que, desde entonces, no aparece rastro de
              ella ni en documentos ni en inventarios. Es una pena que esta
              imagen se haya perdido porque tenía un valor incalculable. La
              empezó a tallar el padre de Salzillo y cuando murió la dejó a
              medias. Después fue el hijo, Francisco Salzillo, quien la tuvo
              que terminar. Ahí radica su valor: es una obra formada a duo por
              dos de los escultores más famosos de la historia murciana. EL
              BELÉN
              El
              Belén que actualmente se encuentra en el Museo Salzillo, le fue
              encargado a don Francisco Salzillo Alcaraz por don Jesualdo
              Riquelme y Fontes. A la muerte de éste pasó a ser propiedad de
              su hermano don Antonio Riquelme y Fontes. Después a la marquesa
              de Salinas, y luego al marqués de Corvera, que lo vendió al
              Museo de Murcia por 27.000 pesetas, en el año 1914.  Actualmente
              el Belén consta de:  
 EL
              BELÉN TIENE EN TOTAL: 556 FIGURAS. Como
              datos curiosos e importantes de saber, podemos decir que el niño
              Jesús recién nacido es la única figura que está tallada en
              madera. Todas las demás están modeladas en barro. Diremos
              también que en el Belén antiguo habían ocho edificios grandes,
              que eran: la casa de Herodes, la casa de Santa Isabel, otra de
              Nazaret, el Templo de Jerusalén, una posada, ruinas de un templo,
              una casa rústica y una choza. Estos ocho edificios que acabamos
              de enumerar estaban todos decorados por dentro con minúsculos
              muebles, aperos o herramientas para trabajar la huerta y enseres
              domésticos. De todos estos edificios, que lamentablemente fueron
              destruidos, vendidos regalados o perdidos en la antigüedad, sólo
              quedan hoy en buen estado: el Templo, la posada y el Palacio de
              Herodes. El
              Belén no fue construido, contrariamente a lo que la gente cree,
              de una vez, sino que todos los años se iban acumulando nuevas
              figuras y nuevas escenas que se le iban ocurriendo, o bien al
              artista o a los dueños del Belén. Como
              primicia quiero que sepáis que no todas las figuras son de
              Salzillo. Hay unos documentos en donde se relacionan con
              escrupuloso detalle las figuras que componían el Belén que fue
              hecho por Salzillo, que cotejadas o comparadas con otra lista de
              cinco años después de su muerte, se puede ver que en la primera
              hay menos figuras que en la segunda. Baste decir que, por ejemplo,
              en la primera lista se inventariaron 261 animales y en la segunda
              358, o sea, 97 animales más. Actualmente, como ya hemos dicho
              anteriormente, hay 364 animales, o sea 103 animales más que había
              en la primera lista. Si las figuras del Belén han aumentado después
              de la muerte de Salzillo, quiere decir que no todo el Belén fue
              modelado por él. LA
              ORACIÓN DEL HUERTO
              Fue
              termina en el año 1752. Es la obra más universal de Salzillo. Y
              lo es por la incomparable figura del Ángel de la Oración. Mucho
              se ha escrito acerca de la sexualidad de este ángel. Incluso se
              ha afirmado que es un ser sin sexo; es decir que no es hombre ni
              es mujer, siendo, al mismo tiempo las dos cosas. A mí,
              personalmente, me parece cierta esta afirmación. Creo que el
              artista quiso plasmar un ángel sin sexo, porque quien mire con
              detenimiento esta magnífica escultura, podrá darse cuenta de que
              de cintura para arriba es todo armonía, belleza..., como si su
              modelo hubiera sido una bella joven. Y en contraposición, sin
              embargo, de cintura para abajo es más bien un hombre de piernas
              musculosas. Una
              de las leyendas más conocidas acerca de cómo pudo el artistas
              conseguir esa bella imagen del ángel, es la siguiente: <<Se
              dice que estando Salzillo una noche muy cansado de ensayar, una y
              otra vez, modelos de caras que fuesen angelicales, se retiró a su
              dormitorio para descansar sin haber conseguido su objetivo. En ese
              preciso momento, sonaron unos golpes en la puerta de la casa y un
              vagabundo le pidió por caridad pasar la noche bajo su techo.
              Salzillo lo dejó entrar y le dio asilo. A la mañana siguiente se
              levanta el escultor para seguir con su difícil empresa y, al
              acercarse a su mesa de trabajo, halla el magnífico dibujo que
              habría de servirle para tallar la figura incomparable de su “ángel”.
              El mendigo había desaparecido misteriosamente.>> De
              esta leyenda se inspiró el poeta Ricardo Gil para componer aquel
              verso que decía: <<Invisibles
              los ángeles bajaban CURIOSIDADES: 
              El ángel costó 2.000 reales; Cristo 690 reales y cada apóstol
              1.500 reales. LA
              DOLOROSA
              Fue
              terminada en el año 1755. La virgen costó 675 reales y cada ángel
              1.310. Es la mejor expresión de <<dolor materno>>. Es
              de vestir, es decir que sólo talló la cabeza, las manos y los
              pies. También
              hay muchas leyendas acerca de cómo pudo conseguir el artista una
              expresión tan real de dolor materno. Se dice que <<modelaba
              la cabeza de la “Dolorosa” y no acertaba con la expresión de
              dolor que él quería imprimirle. Esta
              leyenda es totalmente falsa. Su hija tenía en aquel momento 3 años
              de edad recién cumplidos. Veamos: Si su hija nació en el año
              1753 y él terminó la dolorosa en el año 1755, su hija Maria
              Fulgencia tenía escasamente 3 años. Pero,
              aún en el caso de que alguna de las muchas leyendas fueran
              ciertas, no hubiera sido a esta <<Dolorosa>> a quien
              se le habrían de achacar dichas leyendas, sino a la primera que
              el artista talló. Pues hay mucha gente que ignora que Salzillo
              talló 17 dolorosas que actualmente se conozcan, observándose en
              todas ellas el mismo rictus de dolor que tan famoso lo hiciera. Lo
              cual prueba, a mi entender, que su mente había aceptado un tipo lógico
              de rictus que había sido muy alabado por todos cuantos vieron su
              primera obra. Cito, por orden cronológico, todas las
              <<Dolorosas>> talladas por el artista: 1733 Dolorosa
              que pertenece a la Iglesia de Santa Catalina. Esta es la primera
              de todas ellas. Su rictus de dolor materno es, por lo tanto,
              modelo de todas las demás, incluso de la Dolorosa que sale en
              Semana Santa. El estofado, hecho por su hermana Inés, es
              excelente. 1740 Dolorosa
              que pertenece a la Iglesia de San Miguel. 
              Costó 348 reales. NO SE SABE FECHA
 VERÓNICA 
        Esta
        es una obra poco estimada, en la que el escultor rompe su manera
        habitual de tallar y vuelve al italianismo paterno. El rostro de la Verónica,
        más que dolor, expresa melancolía. CURIOSIDADES:
        Costó 1.600 reales. SAN
            JUAN 
            En
            esta figura sobran las palabras. Es una talla magnífica. Va señalando
            con el dedo el camino por el que ha pasado su maestro con la cruz a
            cuestas. Y su rostro, al mismo tiempo, parece que va diciendo:
            <<...van a cometer una injusticia. Que alguien me ayude a
            evitarlo...>> COSTÓ
            1.900 reales. CAÍDA 
            Los
            ojos son bellísimos y puede apreciarse el inmenso dolor que de
            ellos se desprende. Son unos ojos que al mismo tiempo que suplican a
            quienes le observan, aman a quienes le golpean. El
            sayón que le amenaza refleja, a pesar de su belleza semejante al Ángel
            de la Oración del Huerto, odio en su semblante. Mientras que el sayón
            que tira de la cuerda manifiesta furor en su tensión. Y el soldado,
            manifiesta desinterés. Cosa muy lógica, ya que los soldados
            estaban acostumbrados a esta barbarie. PRENDIMIENTO 
            Fue
            terminado en el año 1765. Aquí, el Redentor manifiesta mansedumbre
            y paciencia. Con una mano parece querer detener la consumación de
            la traición. Antes
            de este <<prendimiento>> hubo otro, que llevaba las
            mismas figuras menos la del legionario. Fue hecho en el año 1736
            por Salzillo. No se sabe donde iría a parar cuando sustituyó a
            este 29 años después. COSTÓ
            8.602 reales. FUENTES
            DE INSPIRACIÓN
            Para
            el tema teológico, Salzillo se inspiró sobre todo en los grabados
            y en las estampas de la época.  Muchos
            tipos populares de la Murcia de aquellos tiempos le sirvieron como
            modelo. Entre otros, se sabe de un vendedor del mercado de Abastos
            apodado el <<anchoa>> y de varios carboneros de los que
            se dice llevaba a su taller para retratar a sus sayones. El
            soldado romano que figura en el <<prendimiento>> se dice
            que es retrato de un empleado de la Curia murciana llamado don Andrés;
            para la santa Clara de los capuchinos le sirvió de modelo su
            hermana Francisca, más tarde religiosa de aquel convento. Los
            vestidos que llevan la mayoría de sus figuras, están inspirados en
            el vestir de la Murcia de aquella época. De manera que en casi
            todos los apóstoles podemos observar esa camiseta huertana que tan
            primorosamente bordaban las mujeres de aquel tiempo para sus hijos o
            para sus esposos. BIÓGRAFOS
            MÁS RENOMBRADOS Baquero,
            Báguena, Ibáñez García y José Sánchez Moreno (Que en 1933 hizo
            la tesis doctoral sobre él) DISCÍPULOS
            QUE TRABAJARON Y APRENDIERON CON ÉL. MANUEL CARO.
            Entró
            en el taller del maestro en el año 1745. Era natural de Caravaca.
            Hay una Purísima de él en Caravaca. FRANCISCO
            FERNÁNDEZ CARO. Nacido
            el 9 de junio de 1760 y muerto el 15 de diciembre de 1841. Ha sido
            frecuentemente confundido con el anterior. JUAN PORCEL. Que
            yo sepa nadie ha investigado todavía sus antecedentes. De él, lo
            único que sabemos hoy, es que es autor de una Santa María de la
            Cabeza, que está en la Iglesia de San Juan de Murcia. JOSÉ LÓPEZ.
            Ha sido considerado equívocamente como hermano de Roque López.
            Entró en el taller de Salzillo el 9 de agosto de 1753. Es, por
            tanto, el primer discípulo que tuvo Salzillo. Como obras suyas
            podemos citar: un TABERNÁCULO que se encuentra en Lorca. FRAY DIEGO
            FRANCÉS.
            Monje Jerónimo del Monasterio de La Ñora. De él conocemos un San
            Antonio de Padua que se encuentra en la Catedral de Murcia. MARCOS
            LABORDA.
            Estuvo con Francisco Salzillo primero y con Roque López después. ROQUE LÓPEZ.
            Era natural de Mula. Este fue el que más ventajas sacó de las enseñanzas
            del maestro, hasta el punto de que se han llegado a confundir las
            esculturas del aprendiz con las del instructor. Murió en 1811 a
            consecuencia de una epidemia de fiebre amarilla que se afincó en
            Murcia, y cuyo principal foco fue en el espacio comprendido entre
            las calles de Madre de Dios, Bodegones y Contraste, que hubieron de
            ser tapiadas. Dicen los documentos <<que
            las autoridades y los habitantes de Murcia huyeron de la ciudad, la
            cual quedó tan abandonada, que al cesar el azote, el piso de las
            calles se hallaba cubierto de hierba.>> Entre otras muchas
            obras, algunas confundidas y achacadas a Salzillo, talló un San
            Roque para Molina de Segura. RELACIÓN
            DE OBRAS DE SALZILLO EN LA CIUDAD DE MURCIA IGLESIA
            CATEDRAL 
 IGLESIA
            DE SAN ANDRÉS 
 IGLESIA
            DE SAN ANTOLÍN 
 IGLESIA
            DE SAN BARTOLOMÉ 
 IGLESIA
            DE SANTA CATALINA 
 IGLESIA
            DE SAN MIGUEL 
 IGLESIA
            DE SAN NICOLÁS 
 IGLESIA
            DE SAN PEDRO 
 IGLESIA
            DE EL CARMEN 
 IGLESIA
            DE SAN ANTÓN 
 IGLESIA
            DE AGUSTINAS 
 IGLESIA
            DE CAPUCHINAS 
   IGLESIA
            DE MADRE DE DIOS 
 IGLESIA
            DE SAN JUAN DE DIOS 
 IGLESIA
            DE VERÓNICAS 
 IGLESIA
            DE ISABELAS 
 IGLESIA
            DE SAN FRANCISCO 
 IGLESIA
            DE SANTA CLARA 
 IGLESIA
            DE SANTA ANA 
 IGLESIA
            DE SANTO DOMINGO 
 IGLESIA
            DE LA LA
            MERCED 
 MONASTERIO
            DE LA LUZ 
 
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